Pedaleando Más Allá de los Límites: Descubriendo Propósitos con Grupetta

Hola, soy Camilo Cobos, un apasionado del ciclismo de ultradistancia y del tracklocross. Mi camino sobre la bici no se resume solo en victorias o metas cruzadas, sino también en caídas, errores y lecciones que me han revelado que cada pedalada va más allá de la competencia: se trata de descubrir un propósito mayor en el viaje.

Mezclar la ultradistancia con el tracklocross es como navegar entre realidades opuestas: las rutas eternas que exigen resistencia infinita y los senderos salvajes donde la bici parece desafiar lo imposible. Requiere no solo fuerza física, sino una mente flexible y una dosis de humildad. Cuando el pavimento da paso a la tierra irregular, cada movimiento se convierte en una apuesta por la perseverancia.

En este ciclismo crudo, donde no hay lugar para excesos, todo es puro y necesario. La ropa se convierte en un aliado práctico. La comodidad de Grupetta ayuda a postergar el desgaste, alineándose con la simplicidad de esta pasión. Sus materiales, pensados para durar sin complicaciones, permiten rodar más lejos y con menos distracciones.

He tropezado infinidad de veces, me he rendido en rutas extenuantes, me he quedado sin energía a mitad de camino o he tenido que parar antes de lo planeado. Sin embargo, esas derrotas me han regalado más que cualquier triunfo. Me enseñaron a prepararme mejor, a escuchar las señales de mi cuerpo y a valorar el apoyo de quienes me rodean, incluso cuando las dudas te invaden.

En Colombia, donde el ciclismo es parte de nuestra esencia cultural, las rutas de ultradistancia están ganando terreno gracias a iniciativas como Brevet Club Colombia y Vuelta a Bogotá Non-Stop. Esta forma de rodar invita a algo distinto: menos show y más reflexión personal. Atreverme a hacerlo con una tracklocross —una bici de piñón fijo diseñada para velódromos, pero adaptada a terrenos ásperos y técnicos— no es lo habitual ni lo más recomendable.

En una de esas jornadas interminables, explorando cientos de kilómetros sin pausa, comprendí la verdadera fusión entre esfuerzo y recompensa. Enfrenté pendientes imposibles, pinchazos inoportunos, planicies eternas y noches que

parecían no acabar. Pero también viví el encanto de un atardecer en lo más alto de una montaña, la libertad de pedalear por caminos desiertos al amanecer y la emoción de forjar un relato que nadie más ha intentado.

Sé que aún me esperan tropiezos, rutas que no completaré y desafíos que pondrán a prueba mi límite. Pero cada intento me hace crecer, especialmente cuando cuento con herramientas como las de Grupetta, que encarnan la resistencia: comodidad, robustez y diseño que van más allá de lo visual. Sus prendas capturan la esencia de esta pasión: simplicidad genuina, autenticidad y un amor por los detalles que marcan la diferencia.

No es una moda pasajera; es equiparte para vivir la experiencia al máximo, sabiendo que cada tela y costura está hecha para soportar el rigor y darte ese plus para ir más lejos, con más intensidad y libertad.

Quiero invitarte a ti, que lees esto, a sumergirte en ese viaje. No se trata de ganar medallas, sino de pedalear con todo tu ser, abrazando lo que te hace humano. En cada caída, en cada tramo superado, en cada reto que parece inalcanzable, allí estaré: este loco con su fija, vestido full Grupetta, como si fuera mi segunda piel, tejiendo una nueva historia.

Si quieres seguir el proceso y los retos de camilo, lo puedes encontrar en Instagram como @Camxcob